Arreglando mi closet vi que tenía unas camisetas blancas que estaban con unas manchas amarillas en la parte de las axilas. Las saqué para lavarlas, pero por más que las tallé a mano las manchas no se quitaban; así que decidí darles una buena limpieza.
Lo que hice fue humedecer la parte de las axilas con agua bien fría, y sobre las manchas le puse el jugo que exprimí de un limón. Después agarré un recipiente plástico con agua y las puse ahí, le aumenté un puñado de sal gruesa y las dejé en el sol (por lo menos por tres horas).
Luego de que pasó ese tiempo, enjuague con agua tibia. Agarré un vaso y le eché ahí una cucharada grande de bicarbonato de sodio, lo mezclé con dos cucharadas de agua fría y revolví bien hasta que se formó una pasta homogénea. Esta pasta tienes que ponerla sobre las manchas amarillentas por aproximadamente una hora. Después, lavé mis camisetas con un jabón neutro, enfocándome en la parte de las axilas y las dejé en el sol hasta que se sequen.
Ya sé que parece un ritual complicadísimo, pero de verdad funciona. Créeme… mis camisetas quedaron como nuevas, ¡inténtalo!
Fuente:melodijolola
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